jueves, 29 de diciembre de 2011

Una esquina de Orduña


Hace ya unos cuantos años que fotografié a este alegre negro cantor. La tarde era gris y la calle estaba algo mojada y, antes de llegar a la esquina ya se oía el vozarrón. Brillaba el hombre por su voz,  y brillaba su piel y se movían armoniosos sus brazos. Estaba allí cantando para ganarse la vida. Era todo dignidad y eso me impresiono. Mientras lo escuchaba y observaba saqué la cámara y como pude la ajusté para las difíciles condiciones de luz. Tenia que guardar aquel momento, el porte digno de aquel hombre, aquella esquina sorprendida y gris. Hoy mirando las fotos creí oír su voz… 



Orduña, Vizcaya. Año 2000

Foto y texto: S. Andrada Lapenne

No hay comentarios:

Publicar un comentario